El Reino Unido tenía fijada la fecha del "divorcio" de la UE para este viernes -día 29- pero se vio obligado a solicitar una prórroga después de que el acuerdo negociado entre Londres y Bruselas fuera rechazado dos veces -enero y marzo- por los diputados y después de que los Comunes se mostrasen en contra de salir sin texto alguno