La policía ha localizado cinco cambuches de esta banda hamponil | Foto: fuente policial
Caracas.- 25 hombres, 6 mujeres y 5 menores de edad. De acuerdo con los organismos de seguridad, esa es la cantidad estimada de personas que integran la banda “los Sanguinarios”, la cual opera en el sector El Alto del Soapire, ubicado en el municipio Paz Castillo de los Valles del Tuy en el estado Miranda. La policía les sigue los pasos, pero hasta ahora, las labores han resultado infructuosas, ya que sus miembros están escondidos en una extensa zona montañosa, cuyo acceso es complicado.
Una fuente policial, que pidió mantener su nombre en reserva, reveló a El Pitazo que los líderes de la banda amenazaron a las madres de los menores de edad con descuartizarlas si los delatan con las autoridades.
La fuente contó, el pasado 29 de julio, que han localizado cinco cambuches de esta banda hamponil, también conocida “los Salvajes”. Este nombre identifica a la organización por la forma cruel como atacan a sus víctimas. A la mayoría, las desmiembran.
El primero de estos escondites fue hallado a finales del mes de marzo de 2021 en una zona montañosa del sector La Calceta de San Juan en El Alto de Soapire. Los uniformados llegaron al sitio, luego de sorprender al garitero de la organización, a quien sus compinches mataron como castigo por no cuidar la zona. Luego, escaparon.
En el lugar la policía halló camas, colchones y ropa, en medio de un espacio improvisado construido con palos y techo de zinc. Además, había una fogata y el cadáver del garitero, quien era conocido con el alias de “Meme”.
Los otros cuatro espacios improvisados fueron ubicados el jueves, 27 de mayo, en las zonas montañosas adyacentes a los sectores 23 de Enero y Las Monjas. Ese día los integrantes de la banda habían atacado a tiros al supervisor agregado de la Policía Municipal de Paz Castillo, Marcos Vanegas, de 43 años de edad, y a su compañera, Yesenia Rivas (38).
Los líderes de la organización son “Luis Silvestre”, “el Julio”, “el Miguel” y “el Gordo”. “Estos hombres cobran vacuna a los parceleros, extorsionan a los comerciantes y roban viviendas para así llevarse los colchones a las montañas y hacer sus cambuches. Entre su armamento cuentan con escopetas (pajizas), pistolas y revólveres”, señaló la fuente policial.
Recientemente circularon fotografías en las que se observa a los miembros de la banda con fusiles de alta potencia.
Los cinco menores de edad que están bajo el control del grupo, tres de ellos hermanos, tienen entre 11 y 14 años. “Estos delincuentes amenazan a las madres de esos niños con obligarlos a mutilarlas, si los delatan con la policía”, dijo el vocero.
Las investigaciones adelantadas sobre la actuación de esta organización hamponil, también revelan que a las voceras de calle -nombre que identifica a las estructuras de los Clap en las comunidades- les exigen vender las bolsas de comida en dólares, para ellos, con ese dinero, comprar municiones. “Asimismo, con la venta de los electrodomésticos robados y el cobro de vacuna están comercializando más armas”, añadió el informante.
Los miembros de esta organización delictiva anteriormente eran liderados por Javier Antonio González Álvarez, alias “el Puti”, quien murió a manos de la policía el 8 de enero de 2021. Se trataba de uno de los 10 delincuentes más buscados de los Valles del Tuy. Ahora, su hermano, “el Gordo”, es uno de los jefes de la banda.
Entre las víctimas de estos individuos figuran Carmen Julia Galindo Mora (69), quien fue localizada mutilada en el interior de su residencia, el 20 de noviembre de 2020. Sus homicidas dejaron un mensaje en una de las paredes del inmueble donde se leía: “Por sapa”.
Cinco días antes, habían matado a Carmen Grecia Cedeño Báez (44 años). Sus asesinos la acusaban de lo mismo. Entre el 9 y el 16 de marzo de 2021, tres hombres se sumaron a esta lista de asesinatos: Miguel Alejandro González Marín (33), a quien decapitaron, Juan Rafael Perrotti Martínez (45), mutilado, y José Alberto Pinto (62), baleado y desmembrado en su residencia.
Cuando mataron a Pinto, los victimarios, con la misma sangre del hombre, escribieron en las paredes de su casa: “No matamos por matar. Por sapo”.
El 29 de julio se hicieron virales por las redes sociales fotos de los presuntos integrantes de la banda “los Sanguinarios”. En las gráficas se observa a un grupo de jóvenes con armas de fuego, botellas de licor y cigarrillos en las manos.
Estas imágenes se viralizaron un día después de que la policía encontró el cadáver de Luis Alfredo León Carrero, de 31 años de edad, en el sector La Ceiba, adyacente al cauce del río Caiza en Santa Lucía. El hombre estaba desaparecido desde la noche del sábado, 24 de julio.
Ese día Luis Alfredo León Carrero conducía un camión, marca Chevrolet, modelo NHR, color blanco, placa A24AS7K, por la carretera La Raisa, cuando fue interceptado por presuntos integrantes de la banda “los Sanguinarios”, a la altura del sector 3 de la urbanización El Manguito. Los delincuentes habían cometido un robo en una vivienda y necesitaban cargar con lo hurtado. Para eso utilizaron el camión de León. Como no sabían manejar sincrónico, lo obligaron a conducir su vehículo y luego, lo asesinaron.
Se maneja la hipótesis de que “Los Sanguinarios” también están involucrados en el homicidio de Joiner Giovanni Padrón Pérez, de 25 años, ocurrido la madrugada del domingo, 25 de julio, en la calle principal del sector 3 de la urbanización El Manguito. Padrón Pérez conducía una moto, marca Empire, modelo Horse, color negro, placa AR0V14A, la cual se llevaron sus asesinos.
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