Caracas.- Allegados del detenido Jordi Gutiérrez, que falleció por tuberculosis en los calabozos de la Policía Nacional (PN) en San Agustín, Caracas, denunciaron que tardaron 10 días en recibir el cadáver, debido a que no aparecía en el sistema.
La denuncia la hizo una amiga del hombre, quien llevaba cuatro años preso por el delito de homicidio. Ella aseguró que desconocía su edad, ya que no poseía cédula de identidad, pues no fue presentado al nacer.
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«No pasaba de los 25 años, lo conocí cuando le llevaba comida a un familiar y le tomamos cariño, porque nadie lo iba a visitar. Él estuvo mucho tiempo enfermo, no es el único, en esas celdas hay muchos más presos con tuberculosis; es muy triste lo que se vive allí», fue el relato de la amiga que estuvo sábado 10 y domingo 11 en las inmediaciones de la morgue de Bello Monte, esperando la entrega del cuerpo. Ella no quiso identificarse.
La mujer que se hizo cargo del cuerpo precisó que la madre del detenido fallecido se encuentra en situación de calle; sin embargo, al enterarse de la muerte de su hijo la acompañó a la morgue. «La señora no está en condiciones de hacer trámites, vive en la calle, pero supo que su hijo murió en el hueso, desnutrido y muy enfermo«, contó la amiga del detenido muerto.
