Aidaliz Guarisma Mérida fue detenida arbitrariamente en su casa el 10 de agosto de 2021 y trasladada dos días después a la sede del Helicoide en Caracas. Estuvo incomunicada durante 12 días | Foto: EFE
Caracas.- El diputado al Asamblea Nacional (AN), José Manuel Olivares, confirmó este viernes 7 de agosto, a través de su cuenta en Twitter que un hombre identificado como Erick Echegaray, de 70 años, quien estaba recluido en El Helicoide, falleció a causa de COVID-19.
Olivares, quien se encuentra en el exilio, detalló que Echegaray fue trasladado el pasado 4 de agosto al Hospital Clínico Universitario con dificultad respiratoria, y que necesitaba ser ingresado en Unidad de Terapia Intensiva (UTI), sin embargo por no haber allí, lo llevaron al Centro Médico Maracay, en el trayecto, murió.
El comisionado presidencial para la emergencia en salud y atención médica al migrante, exigió la «liberación de todos los presos políticos. Son inocentes que están hacinados e indefensos frente a la pandemia en manos de un Estado criminal».
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En su hilo de tuits, hizo el llamado a la comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, aseverando que «ya es suficiente horror que se les prive ilegítimamente de su libertad, como para que además se les condene a muerte sin atención médica».
Ante el anuncio dado por el diputado Olivares, el presidente interino de Venezuela, Juan Guaidó, aseguró que la muerte de Erick Echegaray «es responsabilidad de Nicolás Maduro».
Al tiempo que opinó que es inadmisible «que la indolencia y la criminalidad del dictador siga causando muertes en Venezuela«.
Se unió al llamado de su compañero, y pidió la libertad de los presos políticos «porque su vida está en riesgo frente a la pandemia».
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