Los expertos de la ONU enfatizaron el incremento del hambre en el país y urgieron a implementar acciones | Foto: Ronald E. Peña
Caracas.- El temor a una escalada del deterioro de los derechos humanos en Venezuela centró la discusión en la más reciente reunión de expertos de la Organización de Naciones Unidas (ONU). En el encuentro, efectuado de forma virtual, se instó al gobierno de Nicolás Maduro a implementar, de forma urgente, un plan que disminuya el impacto de la emergencia por el nuevo coronavirus en la población más vulnerable.
«Estamos profundamente preocupados por la espiral de la crisis económica y el efecto que ésta ha tenido en la capacidad de las personas para subsistir de un día para otro. El gobierno debe explicar inmediatamente cómo piensa apoyar a la gente. Mucha de la cual se encuentra al borde de la supervivencia», alertaron los técnicos en materia de derechos humanos.
Los expertos recordaron que muchas de las dificultades que enfrentan los venezolanos se originaron mucho antes de la pandemia. Enfatizaron que la falta de medidas correctivas a las deficiencias en hospitales se profundizaron en medio de la llegada del coronavirus. Refirieron las fallas constantes en el suministro de agua y electricidad. En su opinión, estos son de los principales obstáculos para el funcionamiento adecuado de los centros de salud dependientes del Estado.
«Los hospitales están reportando una escasez de suministros médicos, equipos de protección y medicamentos. Dado el grave impacto de la pandemia COVID-19 en las personas de bajos ingresos, incluso en los países más ricos, esto es alarmante. El gobierno también debería asegurar que la gente tenga el apoyo que necesita para practicar con seguridad el distanciamiento social», exhortaron.
Otra de las preocupaciones de los especialistas de la ONU es el incremento de la persecución política y el auge sostenido del riesgo inseguridad alimentaria. Ratificaron que un tercio de la población no tiene acceso a una cantidad fluida y adecuada de alimentos. Este objeción se basó en el reciente informe del Programa Mundial de Alimentos de la ONU. Respecto al hostigamiento a la disidencia, repasaron el récord de amenazas contra periodistas, abogados y personal de salud en las últimas semanas.
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«Cualquier persona detenida arbitrariamente debe ser liberada inmediatamente y el gobierno debe investigar estas acusaciones. No cabe duda de que el gobierno se enfrenta a numerosos desafíos en este momento, pero los derechos humanos no pueden quedar en suspenso. Incluso, en un momento como éste, el gobierno sigue teniendo la obligación de proteger los derechos básicos de las personas», subrayaron.
Además, reiteraron la petición de una derogación, por razones humanitarias, de las sanciones impuestas por Estados Unidos contra instituciones del Estado venezolano. Esto en consonancia con la solicitud que la Alta Comisionada de Naciones Unidas para los Derechos Humanos ha remitido en las actualizaciones de sus informes sobre Venezuela.
«No obstante, y especialmente a la luz de la pandemia del coronavirus, Estados Unidos debería levantar inmediatamente las sanciones generales, que están teniendo un grave impacto en los derechos humanos del pueblo venezolano», señalaron.
Los expertos que suscribieron este exhorto son Olivier De Schutter, relator especial sobre extrema pobreza y derechos humanos; Léo Heller, relator especial sobre los derechos al agua y al saneamiento; y Koumbou Boly Barry, relatora Especial sobre el derecho a la educación. Los Relatores Especiales integran los Procedimientos Especiales del Consejo de Derechos Humanos.
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