Caracas.- Condiciones de trabajo decentes, plan de vacunación para todos los venezolanos y «un bono de 30 dólares semanales para todos los trabajadores sanitarios que laboran como una compensación ante las circunstancias adversas que tenemos», fueron las exigencias hechas a través de una solicitud por escrito que entregó este 12 de mayo la presidenta del Colegio de Profesionales de la Enfermería del Distrito Capital, Ana Rosario Contreras, al Ministerio del Poder Popular para la Salud.
«De no satisfacerse las necesidades y las aspiraciones del gremio de enfermería procederemos a convocar a un paro nacional y la suspensión de nuestra relación laboral, porque estamos cansados de asumir el sacrificio que implica trabajar en un centro hospitalario en las condiciones tan deplorables como las que se encuentran», indicó Contreras.
Asimismo, señaló que, a propósito del Día Internacional de la Enfermería, «no tenemos nada que celebrar, pero sí mucho que denunciar y exigir; hoy hay miseria, hay muerte, dolor y soledad en nuestros hospitales», expresó.
Por su parte, Ramón Agüero, vicepresidente de la Federación del Colegio de Enfermeros de Venezuela, con 38 años de ejercicio profesional en la administración pública, opina que en la actualidad el país vive «la situación más precaria en toda su historia».
A su juicio, los profesionales de la salud y los venezolanos en general, están viviendo lo que califica como el colapso del sistema público de salud, «e incluso el del privado, en el que el paciente, tiene que llevar absolutamente todo», aseveró Agüero.
De igual manera, considera que el Gobierno nacional le miente a la población con respecto al proceso de vacunación contra el COVID-19.
«Lamentablemente aquí no ha llegado a Venezuela la cantidad de vacunas prometidas por Nicolás Maduro, aquí lo que ha llegado es una cantidad de mentiras, y ahora dice que supuestamente para junio ya estaremos todos vacunados», puntualizó.
Al respecto, Ninoska Flores, personal del turno nocturno de la Clínica Popular de Caricuao, aseguró que el personal de ese recinto médico sí fue vacunado. «Sin embargo, no contamos con los insumos para atender a los pacientes, y estamos aquí para exigir una pronta dotación y apoyar a nuestros colegas que todavía no han sido vacunados», subrayó.
Entretanto, la enfermera Gladis Rosales, manifestó que hace 40 años estudió con mucho orgullo la carrera, pero alega que «hoy mis compañeros y yo estamos en las peores condiciones como nunca antes; no contamos con los implementos adecuados para atender a los pacientes, ni siquiera hay agua en los centros hospitalarios«, afirmó.
En la jornada de protesta realizada en el centro de Caracas, estuvieron presentes trabajadores de enfermería de la Maternidad Concepción Palacios, de la Clínica Popular de Caricuao y de la sede del Seguro Social de Guarenas-Guatire, entre otros.
Reiteraron que seguirán llevando a cabo actividades de calle, y destacan que no son héroes, sino profesionales que quieren seguir haciendo su trabajo en beneficio y protección del pueblo venezolano.
