La mayor cantidad de galenos fallecidos se registró en los estados Zulia y Carabobo. En diciembre se contabilizó la muerte de 17 especialistas por la enfermedad, lo que representó una disminución de 34% en las defunciones con respecto a la cifra reportada en el mes noviembre, que la ONG Médicos Unidos de Venezuela atribuye a una campaña de concienciación por el uso correcto de los implementos de bioseguridad

La circulación del nuevo coronavirus que causa el COVID-19 en el territorio venezolano despertó preocupación dentro de los hospitales por el riesgo de contagio del personal sanitario que debe atender los casos que ingresan diariamente por la enfermedad respiratoria aguda. La disminución a la exposición del patógeno no se logró a un 100% y, en cambio, tuvo impacto sobre el recurso humano de los centros asistenciales.

En 2020 fallecieron por complicaciones asociadas al virus 296 trabajadores de la salud, entre ellos 222 eran médicos cuyos casos fueron reportados entre los meses de junio y diciembre, según el registro que lleva el equipo reporteril de El Pitazo. El balance acumulado desde el 16 de junio, cuando se informó sobre el primer médico fallecido por COVID-19 en Venezuela, registra que en junio murieron 7; en julio, 24; en agosto, 55; en septiembre, 61; en octubre, 32; en noviembre, 26 y en diciembre, 17.

La data, elaborada con información de la ONG Médicos Unidos de Venezuela y datos de reportería de los corresponsales de El Pitazo, muestra que entre noviembre y diciembre hubo una disminución 34% de los médicos fallecidos reportados. En entrevista con El Pitazo, el director de la ONG, Jaime Lorenzo, atribuyó la reducción a la campaña que han emprendido en el país para alentar al personal sanitario sobre el uso adecuado del material de bioseguridad.

Cuando la enfermedad pandémica comenzó a afectar a los venezolanos, se hicieron más fuertes los reclamos del personal de salud por una dotación oportuna y suficiente de kit de protección, como tapabocas, guantes y trajes especiales, no solo para cubrir a médicos sino a todos los trabajadores de los hospitales. La poca disponibilidad influyó a todas luces en el incremento de infecciones en médicos y enfermeras y demás trabajadores en los hospitales, coincidieron especialistas entrevistados. Al menos 81 médicos fallecidos reportados en el recuento ejercían su profesión en centros de salud al momento de enfermar por coronavirus.

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Con los últimos datos, se determina que la cifra acumulada hasta diciembre de médicos fallecidos por COVID-19 representa 21,6 % de las 1.025 muertes del personal sanitario admitidas por la administración de Nicolás Maduro hasta el 30 de diciembre.

En el último mes del año 2020, el peso de la letalidad se observó en el occidente del país, especialmente en la región zuliana y andina. De las 16 defunciones, 6 ocurrieron en Zulia, 3 en Táchira, 3 en Mérida, 2 en Lara, 1 en Trujillo, 1 en Falcón y 1 en Monagas, al oriente del país. En general, las entidades donde se han reportado más defunciones son: Zulia, Carabobo, Anzoátegui, Bolívar y Distrito Capital.

Se reportó en diciembre el fallecimiento de otras dos ginecobstetras, un anestesiólogo y un pediatra. Estas son las tres subespecialidades de la medicina que más han sido golpeadas por el impacto del coronavirus en el personal médico, según el registro de la ONG Médicos Unidos de Venezuela.

Médicos consultados por El Pitazo comentaron que las muertes de médicos por coronavirus acentúan aún más el déficit de especialistas que tiene el país desde hace cinco años debido a los bajos salarios y la crisis hospitalaria, lo que limita a su vez la atención de pacientes e influye en la reducción de camas. Indicaron que los fallecimientos implican la pérdida de hasta 30 años de experiencia y, por consiguiente, la disminución de capital humano para formar a las generaciones de relevo que, en su mayoría, ha migrado del país por la crisis económica.