Caracas.- Miguel Pizarro, uno de los tantos diputados venezolanos en el exilio, intervino por vez primera en el Consejo de Derechos Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) y denunció ante los altos representantes de ese organismo la muerte del capitán de corbeta, Rafael Acosta Arévalo, y el caso de Rufo Chacón, el joven tachirense de 16 años que perdió la vista a raíz de los múltiples perdigonazos que recibió a quemarropa en su rostro, durante una protesta en el estado Táchira.
Ante la parcialidad política de la Justicia venezolana, Pizarro pidió al Consejo de DDHH de la ONU que los Estados miembros hagan una Exploración de Investigación en Venezuela para que los verdaderos responsables involucrados en los casos de Acosta y Chacón, sean severamente sancionados y judicializados.
Es importante destacar que el parlamentario exige la exploración de investigación por parte de la comunidad internacional porque una autopsia reveló que Rafael Acosta Arévalo sí fue sometido a tortura mientras estaba bajo custodia de los funcionarios de la Dirección General de Contrainteligencia Militar (Dgcim).
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El también dirigente de Primero Justicia, aseveró que seguirá velando desde el extranjero para que se respeten los DDHH de los venezolanos.
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