Foto: cortesía
Caracas.- El presidente encargado de Venezuela y jefe de la Asamblea Nacional (AN), Juan Guaidó, ofrece este sábado 15 de febrero un balance de su gira internacional que culminó el pasado martes, luego de visitar ocho países en tres semanas.
En rueda de prensa, Guaidó dijo que su viaje se produjo para «profundizar el cerco económico a la dictadura de Maduro» y denunciar ante el mundo la amenaza que representa el gobierno socialista para los venezolanos y Latinoamérica.
«Este es un año de acciones, decisiones y resultados para Venezuela y la región», expresó.
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El mandatario interino destacó que al igual que ocurrió en 2019, durante su gira de 23 días le fue ratificado el reconocimiento diplomático y «a quienes luchan en contra de la dictadura».
Aunque, señaló que su iniciativa también ha implicado riesgos como el «secuestro» -como calificó la detención de su tío Juan José Márquez- y el exilio de dos sus colaboradores cercanos por órdenes de captura en su contra: Yon Goicoechea y José Gregorio Guerra. «Además, desmantelaron mi despacho de la presidencia», dijo.
«Fuimos a denunciar en cada uno de los países detener el financiamiento de grupos irregulares -como el ELN- y a la manutención de un paraestado. Hoy, (Nicolás) Maduro no representa al Estado, el Estado desapareció en Venezuela, no protege al ciudadano ni controla la economía», señaló.
En ese sentido, informó que este lunes anunciará las próximas acciones de calle para presionar a Maduro en el país y el martes presentará nuevas medidas para cerrar el “cerco financiero a la dictadura de Maduro”.
Guaidó también se refirió a su salida de Venezuela el pasado 19 de enero. Aseguró que no fue un proceso «sencillo». Aunque no dio detalles del periplo para eludir los controles fronterizos dijo que cruzó la frontera terrestre con Colombia, tal como ocurrió en febrero de 2019, «gracias a funcionarios aliados de la Constitución» y «del rescate a la democracia».
Recordó que el primer paso de su gira fue unirse a la Cumbre Hemisférica Ministerial contra el Terrorismo en Bogotá, donde se reunió con el secretario de Estado de EE. UU., Mike Pompeo, así como con el presidente colombiano, Iván Duque.
«Compartimos información importante de inteligencia que hemos recaudado sobre la manutención, protección y financiamiento del régimen de Maduro a grupos irregulares y (abordamos) los mecanismos para detener este desangramiento a la República de Venezuela», indicó.
Esas reuniones, rememoró, se produjeron a un año del atentado en manos del ELN a una academia de policías en la capital del vecino país, cuyos autores materiales, según el líder opositor, fueron entrenados en Venezuela. «La denuncia fue alta clara y fuerte: hay que luchar contra los que protegen el terrorismo internacional», insistió.
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