Nueva Esparta. Ante la inoperatividad prácticamente todos los servicios médicos asistenciales desde hace más de un año en el Instituto de Prevensión y Asistencia para los docentes del Ministerio para la Educación (Ipasme), en Nueva Esparta, la secretaria general de la Federación de Trabajadores de la Enseñanza (Fetraenseñanza), Jacqueline Gil, denunció su cierre técnico.
Gil afirmó además que el deterioro de la atención al afiliado y sus familiares alcanza niveles críticos. “No cuenta con consultas, rayos X ni laboratorio desde hace más de 12 meses. Solamente funciona, y a medias, el servicio de odontología”, aseguró.
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La situación afecta a 2.000 docentes dependientes de dicho ministerio y su núcleo familiar. “Exhortamos a que atiendan la situación porque es preocupante que además el sistema de salud en general está en crisis y eso significa que no hay alternativas para los afiliados”.
La gremialista insular declaró además que este sector aspira, a través de una nueva contratación colectiva, a elevar sus salarios a por lo menos 600 dólares, y rechaza que hasta la fecha el Ministerio y el gobierno de Nicolás Maduro se nieguen a esta discusión.
“La hiperinflación que existe en la economía de Venezuela devora los profesionales de la docencia y esto podría generar problemas para el reinicio de clases”, afirmó Gil.
Asimismo, hizo un llamado a los padres y representantes a estar atentos a lo que pueda suceder a partir del 16 de septiembre ante el anuncio que se ha dado en relación a la contratación de “docentes exprés”.
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