San Felipe.- Largas son las colas que se aprecian desde hace 28 días en las estaciones de servicio del estado Yaracuy.
Conductores de transporte público como particulares, señalan que esperan hasta dos horas en cola para poder recargar de combustible el tanque de sus vehículos.
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La falla que se ha agudizado con el correr de los días, ha comenzado a repercutir en el servicio de transporte urbano, cuyos vehículos, entre ellos carritos por puestos, vans y microbuses, dejan de operar entre la 1:00 pm a 3:00 pm para hacer la cola en las gasolineras.
Jean Carlos Juárez, transportista urbano, señaló que las nueve estaciones de servicios con las que cuenta la capital del estado Yaracuy están colapsadas a raíz de la crisis de combustible y, para no perder tiempo haciendo cola todos los días, se ha visto en la necesidad de habilitar varias garrafas plásticas para almacenar allí combustible para uno o dos días.
Estrategia similar hace, el transportista particular Diego Vielma, quién se abastece de combustible extra para descansar de las colas. «Trabajo tres veces a la semana como corredor de seguros y, no puedo darme el ‘lujo’ de estar metido en una cola todos los días porque debo de viajar de un municipio a otro visitando a las empresas que contratan nuestros servicios».
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Por su parte, la conductora Yetzamar Mujica, denunció que trabajadores de gasolineras aparentemente cobran un porcentaje adicional por llenar cualquier recipiente plástico. Según la denunciante en las estaciones de servicios cobran Bs. 5.000 por cada litro de gasolina adicional.
En cuando a la deficiencia que ha generado la falla de combustible en la actividad del transporte urbano, usuarios señalaron que el servicio está en ‘crisis’ desde que la gasolina comenzó a escasear.
Dulce León, habitante de la urbanización San Antonio, dijo: «El servicio de transporte urbano ha desmejorado en un 45 por ciento, porque de 12:00 pm a 2:30 pm el servicio se torna pesado porque no hay tráfico».
Para la usuaria Reina Zambrano, residenciada en la urbanización Pie de Montaña, municipio Cocorote, señaló que la mayoría de las veces le ha tocado irse y venirse a pie de su casa al trabajo porque los pocos carros que trabajan no dan abasto para atender la gran demanda que existe en el servicio. «Para la zona no hay suficientes vehículos y, ahora con la escasez de combustible el servicio es casi nulo».
