Foto: archivo/referencial
Táchira.- La noche del 3 de febrero murió una bebé en el Hospital Central de San Cristóbal. Oriunda del Borotá, en el municipio Lobatera, la pequeña de dos meses tenía desnutrición severa, pesaba tan solo 900 gramos.
Además de la desnutrición, los médicos le habían diagnosticado sepsis neonatal tardía, hipoglucemia, trastorno metabólico y artogriposis. Sin embargo pocas horas después de llegar al centro asistencia, murió de un paro respiratorio.
La mamá de la pequeña es una adolescente de 17 años y según denunció la fundación Gotas de Esperanza Venezuela, la joven también es víctima de abusos contra su humanidad, pues su papá es a la vez el padre de la niña fallecida.
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La muerte de la niña fue la segunda que se presentó en Táchira por desnutrición severa en menos de 24 horas. En ambos casos aunque son familias distintas, destaca que las madres son adolescentes y los padres hombres que les duplican la edad.
Ante estas situaciones que se han registrado en Táchira, Instituto Autónomo Consejo Nacional de Derecho del Niño Niña y Adolescente (Idenna) publicó un comunicado de prensa donde instaba a las comunidades a denunciar la violencia a menores de edad en sus comunidades.
«Hacemos un llamado a la colectividad en general a denunciar este tipo de situaciones que atentan contra la integridad física de nuestros niños, niñas y adolescentes. Insto a los ciudadanos a acudir oportunamente ante instancias competentes como: los organismos de seguridad y Ministerio Público a denunciar si se tiene conocimiento sobre posibles casos de maltrato infantil y vulneración de derechos», dijo Mariana Acosta, coordinadora regional del Idenna.
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