Una muchacha de 27 años de edad, que tiene problemas psicomotores y con una mentalidad de una niña de 8 años de edad, fue una de las beneficiadas. Foto: Referencial
Mérida.- La tiendita de Landora realizó, este fin de semana, la entrega de la segunda edición de la campaña “Un Niño, Un Osito», con el propósito de alegrar a niñas y niños que viven en comunidades vulnerables de la ciudad de Mérida. En esta oportunidad se vieron beneficiados 80 niños en edades comprendidas entre 6 y 8 años, quienes recibieron ositos tejidos a mano, alimentos, ropa y productos de higiene personal donados por distintas personas y organizaciones.
“Para esta ocasión, en el censo que se realizó para determinar la cantidad de niños a quienes se les donarían los juguetes, se tomó en cuenta un caso en especial, una muchacha de 27 años de edad que tiene problemas psicomotores y con una mentalidad de una niña de 8 años de edad”, manifestó Karina Alarcón, propietaria de La tiendita de Landora.
La tiendita tuvo la iniciativa de realizar alianzas con otros negocios y organizaciones para también llevar a los pequeños ropa, alimentos, juguetes y artículos de higiene personal. También fueron donados algunos postres y dulces elaborados por emprendimientos locales.
Dos meses de recolección
Durante los meses de julio y agosto, la campaña «Un Niñito, Un Osito» contó con el apoyo de padrinos y madrinas, quienes aportaron su granito de arena para llevar a cabo esta actividad y quienes también dispusieron de su tiempo para escribir una carta a cada niño apadrinado, que fue entregada con su respectivo osito.
La Asociación Civil Nuevos Despertares, organización no gubernamental aliada de El Pitazo, tuvo la oportunidad de participar en esta segunda edición donando un tapabocas a cada niño y niña de la comunidad de Raúl Leoni, en San Jacinto, municipio Libertador.
“Lo más importante fue esa posibilidad y esa grandeza de poder llevar esperanza, de poder llevar un mensaje positivo, un mensaje alentador que pudiera brindarles a ellos la posibilidad de creer que a través de pequeños cambios se puede generar grandes resultados”, aseguró Alarcón.
La entrega de los ositos y donativos se cumplió siguiendo las medidas de seguridad para la prevención del COVID-19. Los equipos de bioseguridad fueron donados por la empresa Seguridad y Salud Ocupacional.
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