Ginebra.- La Oficina de las Naciones Unidas para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (Ocha) denunció este 14 de mayo que los ataques con misiles entre palestinos e israelíes han causado daños en más de 200 viviendas y 31 centros educativos en la franja de Gaza.
“Estamos alarmados por la escalada del conflicto entre los Territorios Palestinos Ocupados e Israel. El número de víctimas sigue aumentando en ambas partes y la población civil está sufriendo”, expresó en una rueda de prensa el portavoz de la Ocha, Jens Laerke.
Laerke indicó que cientos de personas, muchas de ellas procedentes de campos de refugiados en Gaza, están buscando refugio en colegios administrados por la ONU, mayormente a través de la Agencia de Naciones Unidas para los Refugiados de Palestina en Oriente Próximo (Unrwa).
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En la franja de Gaza, donde viven aproximadamente dos millones de palestinos, las agencias humanitarias están trabajando en refugios para ofrecer ayuda y dinero en efectivo a las familias desplazadas por el conflicto.
Además, los ataques están afectando el acceso al agua y servicios sanitarios. Jens Laerke también advirtió que el número de pruebas de diagnóstico del COVID-19 se ha reducido drásticamente y que las personas no pueden llegar a los centros médicos de manera segura para acceder a tratamientos y vacunas.
Por otro lado, el cierre de fronteras con Israel ha provocado escasez de combustible, ya que las reservas en Gaza son muy limitadas, lo que está ocasionando cortes de electricidad de entre 8 y 12 horas diarias.
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