Ciudad Guayana.- El anuncio de la ampliación del cono monetario actual aceleró la desaparición en los mercados del billete de 100 bolívares. El de 50, la denominación más baja, desde hace varios meses no es aceptado en centros de ventas ni en unidades de transporte público.
Las nuevas piezas de 10.000, 20.000 y 50.000 bolívares, sin aparecer en la calle, ya desplazaron al billete de 100 bolívares, en medio de un espiral hiperinflacionario que Maduro justifica bajo el argumento de la guerra económica, pero que expertos vinculan al mal manejo de la política económica a cargo de la gestión socialista.
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Carteles como “no se aceptan billetes de 100” se leen en pequeños locales del mercado de San Félix, una zona minada por comerciantes informales y revendedores de productos básicos y de higiene personal.
“No los puedo aceptar porque a quien yo le compro la mercancía tampoco me los recibe, y no voy a trabajar para perder”, dijo una revendedora que prefirió no identificarse.
La situación es más complicada para quien debe sacar efectivo de una entidad bancaria. María Cordero, una maestra jubilada de San Félix, caminaba por el mercado después de pasar por un cajero electrónico. “Tengo nada más billetes de 100 bolívares y uno de 500; eso fue lo que me dieron en el banco, pero aquí en el mercado nadie me los acepta”, dijo Ramírez, quien intentaba comprar un jabón, pero no encontraba ningún comerciante que le aceptara la denominación de billetes que tenía para pagar el producto.
Los usuarios denuncian además que este centro de ventas, ubicado a una cuadra de la sede de la Alcaldía de Caroní y un comando castrense, está controlado por colectivos chavistas. “Aquí la Guardia no hace nada. Yo sí los he visto haciendo recorridos, pero es como si no vieran nada”, dijo una usuaria del mercado a El Pitazo.
Transporte público
Los transportistas, por su parte, dicen que no se niegan a aceptar el billete, pero se encuentran en una encrucijada cuando van a comprar alimentos. “Si me niego a recibir los 100 bolívares, vienen y me sancionan, pero si los acepto, cuando voy al mercado los bachaqueros no me los reciben. Entonces, ¿cómo vamos a comer los transportistas?”, dijo Luis Guzmán, un chofer que conduce un autobús que cubre la ruta Puerto Ordaz-San Félix.
Un usuario que baja del autobús de Guzmán mostró su preocupación porque pagó con un billete de 500 y de cambio le dieron dos billetes de 100. “¿Ahora qué hago con esto?”, se preguntó.
