Guarenas.- Trabajadores de Laboratorios Leti y Genven, plantas ubicadas en Guarenas estado Miranda, protestaron al mediodía de este lunes ocho de abril para rechazar los «salarios de hambre» que perciben, y exigir apoyo del gobierno de Nicolás Maduro para incrementar la producción y que eso se traduzca en reivindicaciones salariales.
José Zapata, delegado del Sindicato Nacional Bolivariano de Trabajadores del Sector Químico y Farmacéutico, denunció que desde el pasado mes de enero, los operadores del turno diurno perciben 4.500 bolívares semanales, mientras que a quienes laboran en el horario mixto (tarde-noche) les pagan 6.500 bolívares a la semana, lo que calificó como «salarios de hambre».
Zapata también manifestó que la capacidad de la planta permite la producción de 10 millones de unidades de medicamentos mensuales, pero en la actualidad sólo se fabrica un promedio de un millón de unidades al mes, lo que significa que la producción se ubica en 10%.
«El 95% de la materia prima es importada y el ajuste de la divisa oficial al precio del mercado negro llevó a que la Sundde como ente regulador permitiera que se incrementaran los precios de venta de los medicamentos», refirió.
Asimismo, señaló que la situación económica de la empresa ha provocado el despido de 400 trabajadores de un total de 1.600, lo que representa una reducción de nómina de 25%.
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En este sentido, José Zapata denunció que «el motor farmacéutico anunciado por Nicolás Maduro en 2016 nunca arrancó». El pasado mes de marzo, el gobierno de Maduro relanzó este programa orientado al incremento de la producción de medicamentos y la exportación de los mismos; sin embargo, hasta el momento no se ha logrado ningún avance.
De igual forma, el decreto de la zona económica especial en el eje Guarenas-Guatire tampoco se ha materializado.
«Todo esto se ha quedado en anuncios, pero en las industrias no se ve ni un solo resultado. Por el contrario, está situación ha generado que el sector trabajador sea el más golpeado, al enfrentar la crisis inflacionaria del país», señaló.
Para el próximo miércoles 10 de abril se tiene prevista una nueva protesta, junto a trabajadores de otras empresas del sector farmacéutico en la zona de Guarenas para continuar con las exigencias.
«Es imposible que alguien pueda vivir con un sueldo mínimo. Nosotros los trabajadores queremos trabajar y estamos comprometidos para mejorar la productividad, pero eso no depende de nosotros. Queremos que nos escuchen y se tomen medidas para nuestra protección», concluyó Zapata.
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