Mérida.-. En recorrido realizado por El Pitazo a diferentes puestos de vendedores informales de la ciudad, este miércoles 19 de junio, se constató que los comerciantes merideños usan pesos colombianos y dólares para realizar transacciones comerciales.
Los comerciantes aseguran que estableciendo precios al equivalente en dólares o pesos colombianos protegen su mercancía, «los bolívares tienen más valor si son en efectivo, los huevos, por ejemplo, valen veinte mil en efectivo, pero si me va a realizar una transferencia están en treinta mil» dijo Martha Sánchez, vendedora ambulante ubicada en el centro de la ciudad.
En cuanto a los electrodomésticos y celulares, ocurre lo mismo, el precio de teléfono un inteligente en las tiendas que visitó El Pitazo están entre $ 150 y $200 o lo equivalente en bolívares soberanos.
«Ayer estaba averiguando el precio para ir hasta el puerto, para ir a comprar unas cosas, el señor que me hace la carrera me dijo que estaba en 350 dólares, es que en Venezuela hasta el dólar se devalúa» dijo Coromoto.
Rondón comerciante quien comentó que hace dos semanas la carrera le costó $ 250.
Hay quienes han denunciando que la gasolina la venden en dólares, consiguen 20 litros de gasolina por $ 20, sin embargo, hay quienes están en la necesidad de adquirir combustible en dolares. «yo compro 20 litros de gasolina casi todas las semanas, tengo que trabajar y es imposible para mi realizar una cola de cinco días, al menos sé que la persona que me vende la gasolina no la mezcla con nada» dijo para El Pitazo un entrevistado que no quiso ser identificado.
A pesar de que son los usurarios los que muchas veces ofrecen pagar en la moneda extranjera, hay otros que no tienen lo equivalente que piden los comerciantes.
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«La realidad es que se hace muy cuesta arriba pagar en dólares, pues yo no gano en divisas y tampoco tengo a nadie que me envíe dinero desde otro país, acá pides cualquier servicio y te sacan un lista donde te muestran los precios en dólares o su equivalente» aseveró Manuel Marquina un trabajador publico que gana un poco más del sueldo mínimo.
Merideños aseguran que no hay quien haga supervisión de lo que ocurre en los establecimientos comerciales informales y formales, del mismo modo, aseguran que la única solución es que la economía se estabilice.
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