Caracas.- De acuerdo con los cálculos de técnicos de la Cámara Venezolana de la Industria de Alimentos (Cavidea) hay decrecimiento del consumo de alimentos de los venezolanos en general de un 96%. En cuando a la demanda de alimentos procesados la baja es de 62%.
El más reciente informe de coyuntura de la entidad gremial informó que la adquisición de la proteína animal cayó en promedio 86%; el consumo de lácteos y sus derivados bajó 88%; en los carbohidratos 68%; raíces y tubérculos 56%; y granos y leguminosas descendió alrededor de 60%.
Las causas de esta merma tan pronunciada en el consumo de todo tipo de alimentos se deben “a falta materia prima y por otro lado está la caída en el consumo. El venezolano no tiene capacidad de compra, pues gana cerca de tres dólares al mes”.
Así lo informó el presidente de Cavidea, Juvenal Arveláez, quien también añadió: “Se necesita establecer el reimpulso del consumo de alimentos, reactivar el aparato productivo nacional, generar empleos estables, contribuir a la recaudación de impuestos y recuperar las cadenas agro-productivas del país”.
Además planteó que para reestructurar este sector de la economía es necesario generar soluciones e incrementar el poder adquisitivo de la población, “recuperar el tejido industrial y comercial con financiamiento, aumentar la oferta en materia prima nacional, por lo cual es necesario darle apoyo al sector primario de la población; y por otro lado, potenciar la industria a partir de la tecnología como factor de desarrollo político y social”.
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Dijo que las empresas agrupadas en Cavidea aspiran que el gobierno venezolano rectifique sus políticas públicas para reactivar el aparato productivo nacional, generar empleos estables, contribuir a la recaudación de impuestos y recuperar las cadenas agro productivas del país.
Los empresarios sugieren focalizar el trabajo del gobierno venezolano en la recuperación de servicios públicos (luz, agua, salud, combustible, trámites); eliminar los controles “que retrasan y encarecen las labores de producción y comercialización”, y defender lo “Hecho en Venezuela”.
“Un país con una industria nacional fuerte es un país capaz de alimentar a sus ciudadanos, darle empleo estable a su gente y generar recursos para pagar lo que no es capaz de producir nacionalmente”, finalizó Arveláez.
Con información de Cavidea
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