Caracas.- Con tan solo 25 años, Yulimar Rojas se coronó como la reina del atletismo en Venezuela y la mejor del mundo en salto triple. Esta joven caraqueña, pero criada en Anzoátegui, ha logrado llenar rápidamente su vitrina de medallas, trofeos y reconocimientos, prácticamente no hay espacio para otro premio, pero ella no entiende eso, siempre va por más. Ya no hay récords que batir, ya no hay marcas que establecer, ya no tiene rival, Yulimar lo ha logrado todo.
Cuando Yulimar Rojas comenzó su carrera en el salto triple, quien dominaba esta disciplina era la colombiana Caterine Ibargüen, pero eso quedó en el pasado. El mundo lo sabe y Yulimar también. «Acabo de tomar una nueva era en el salto triple, ya que Caterine Ibargüen ha sido la que mandaba, pero bueno, ahora estoy yo y lo he tomado con mucha fuerza y toda la seriedad posible», manifestó Rojas a El Pitazo, este miércoles 15 de septiembre.
Sin lugar a dudas, en la actualidad Yulimar Rojas es la mejor saltadora del mundo; medalla de oro en Tokyo 2020, medalla de plata en Río 2016, récord olímpico, récord mundial y trofeo de diamante. La negrita de Venezuela está acostumbra a ganar, inclusive, en su vitrina ya sumó el corazón de los venezolanos que se ganó con su humildad y carisma. Eso quedó demostrado cuando cientos de personas la «zarandiaron», como dijo ella, al llegar al país el martes 14 de septiembre.
Aunque Yulimar Rojas ha conseguido todos estos triunfos, sigue soñando: «A pesar de todo lo que he logrado, siempre pienso en grande. Soy una persona muy soñadora, con muchos objetivos que me pongo diariamente y trato de lograrlos día a día y es parte de mi vida», sostuvo Rojas.
Con todos los récords en su poder, la criolla piensa en grande, siente que le faltan metas por cumplir, objetivos por alcanzar y es que en cada salto que da deja la misma pasión con la que baila antes de cada competencia. No hay obstáculos para ella, y si los hay, no baja la cabeza; entrena, trabaja duro y echa un bailecito para relajarse, pues confesó que de no ser atleta hubiese sido bailarina. Que el baile es su pasión.
«Yo creo que aún me queda mucho camino que dar, tengo muchas aspiraciones todavía. A pesar de la edad que tengo, 25 añitos, hemos sabido ir llevando este camino bonito que tenemos», dijo Rojas, al tiempo que confesó que le alegra que muchos venezolanos y personas en el mundo vean en ella una muchacha digna de admirar y le emociona que su carrera sirva de inspiración para muchos jóvenes.
Esta web usa cookies.