Caracas.- Otra sorpresa en la presente Liga de Campeones se dio este miércoles 8 de mayo, esta vez a favor del Tottenham, equipo inglés que salió con desventaja en el partido de ida, pero que en el de vuelta remontó ante el Ajax, gracias a un triplete del brasileño Lucas Moura, para clasificar a la final.
Dos equipos ingleses -el otro es el Liverpool- serán los que disputen la Champions, el próximo 1° de junio en el Wanda Metropolitano de Madrid.
Fue
un partido vertiginoso, con un gran dominio del Ajax en la primera
parte que le permitió adelantarse con dos goles de De
Ligt y Ziyech y
en el que pareció que los holandeses llegarían a la soñada
final.
Sin
embargo, el joven conjunto de Ámsterdam pecó de inocencia al darse
por triunfador y se vio sobrepasado por un Tottenham que,
literalmente, le pasó por encima en la segunda parte.
El entrenador Erik ten Hag no mintió en la previa del encuentro cuando aseguró que sus hombres jugarían obviando la ventaja del partido de ida (0-1), como si la batalla continuara en tablas.
Enfrente se encontraron a un Tottenham obligado a remontar un resultado adverso, con el surcoreano Heung-Min Son de vuelta a la cancha y un Jan Vertonghen que tuvo que jugar con una máscara protectora debido al fuerte golpe que se llevó en el encuentro de ida.
Fue el Ajax el primero que la tuvo, cuando Kieran Trippier, encargado de marcar a Matthijs de Ligt en el saque de esquina, dejó que el central se moviera a sus anchas por el césped, ocasión que aprovechó el holandés para correr hacia el área pequeña y cabecear el esférico al fondo de la red, marcando el 1-0.
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En el 36, un contraataque del Ajax pilló a la defensa del Tottenham desprevenida, Tadic corrió por la izquierda, se la cedió a Ziyech y el marroquí, sin parar la bola y con una colocación del cuerpo perfecta, hizo un disparo cruzado que convirtió en inútil la estirada de Lloris y puso el 2-0 en el marcador.
Pochettino, obligado a hacer algo, puso toda la carne en el asador al quitar al centrocampista Wanyama y sacar al delantero centro Fernando Llorente, un hecho que insufló nuevos ánimos a los suyos y cambió totalmente el ritmo del partido.
El primero llegó gracias a un espectacular y rápido contraataque en el que, en apenas cuatro toques, los ingleses se colocaron en el área de Onana para que el disparo de Moura estrenara el casillero del Tottenham en el minuto 55.
En el segundo tanto, cuatro minutos después, Onana no pudo atajar un disparo a bocajarro, el rechace lo recogió el brasileño, retrocedió con la pelota unos metros driblando a dos defensas del Ajax y, en un disparo a media vuelta, marcó el tanto que hizo soñar a los aficionados ingleses que se desplazaron a Ámsterdam.
El partido en ese momento se volvió loco, ya que un gol del Tottenham le daba el pase a la final y la prórroga era imposible.
En el minuto 95, cuando el Johan Cruyff Arena celebraba lo que parecía el pase de su equipo a la final, un casi despeje de la defensa inglesa terminó tras un par de toques en las botas del hombre de la noche, Mouras, que con un disparo raso y de zurda batió a Onana.
